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Es fundamental para una formación en términos de consolidación hallar una senda evolutiva en la cual desarrollar sus propias ideas e ir creciendo en destreza técnica y ejecución expresiva, buscando un equilibrio entre complejidad musical y un plano técnico cuidado en todos los aspectos, un proceso que va más allá de dominar un instrumento.

Los bizkainos Empire Of Disease han dado un paso importante con su segundo trabajo «Shadows In The Abyss», exponiendo un potencial tremendo en cambios de ritmo trepidantes e imprevisibles y unas voces que transmiten agresividad y mucha profundidad, buscando dar un toque original a un estilo algo saturado de bandas, una pegada muchísimo mayor y un alto nivel técnico en tesituras más complejas, consolidando un estilo personal en elaboración y potencia.

Está resultando de lo más significativo y sorprendente la fluidez y exhibición de solidez rítmica que la banda está ofreciendo en la actualidad en sus directos fruto de la experiencia adquirida de estar continuamente ofreciendo actuaciones, no solamente en Euskadi, sino también en países como Alemania, Bélgica, Suiza, Italia y Portugal; siendo tremendamente impactantes en contundencia y aportando cierta frescura en arreglos y destellos técnicos que la mayoría de grupos en este estilo han perdido.

En la nueva visita a la sala Groove (Portugalete, Bizkaia) dejaron constancia de su crecimiento musical con una descomunal descarga de furia de death metal melódico, progresando hacia terrenos más técnicos y realzando con calidad los contrastes entre agresividad vocal y melodía en las precisas transiciones guitarreras, con un rodaje asombroso en conjuntez tanto en la presentación de su nuevas composiciones como «The Valley», «Time For A New», «From the Depths» y «Digging Our Graves» como en el repaso a cortes mucho más agresivos y directos de su anterior disco «With All My Hate», con riffs entrelazados muy meritorios y cambios de ritmo frenéticos en «Wated Your Time» , «To Be Reborn Among Ruins» y «With All My Hate», acaparando diferentes registros vocales su cantante Pintxo, tirando mucho hacia sonoridades penetrantes y encontrando siempre un estilo propio dentro de la caña.

Una actuación excelentemente encauzada, reflejando honestidad y argumentos, con la suficiente capacidad de ofrecer técnica, calidad y agresividad, sin salirse de ciertos aspectos, con una naturalidad absoluta a la hora alternancia de combinar variedad en estructuras abruptas y partes rítmicas progresivas, concluyendo con una demoledora e intensa «Social Dementia», dejando de manifiesto una brillante evolución y consolidación en un futuro próximo. ¡Un grupo que siempre apetece ver sobre un escenario!

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