Una línea directa en pura intensidad y sin paliativos es lo que prodigan los músicos de Sanngre sobre un escenario, unas bases bien construidas en el plano netamente musical y una absoluta convicción a la hora de proclamar sus reivindicaciones ante las injusticias que seguimos padeciendo en este planeta, metralla predispuesta a salpicar todo foco del conservadurismo que tanto azota en el mundo y tanto aliena a sus habitantes, a todos esos cómplices que con su verborrea alimentan la sed de venganza, a esos buitres carroñeros de la vieja Europa, esos asesinos en potencia que se permiten el privilegio de señalarnos con el dedo de Dios por cuestionar su pantomima diaria.
La rabia y la venganza cosido a base de acelerado y agresivo crossover, con la mayor fuerza posible, para acabar con todo abuso de poder y una manipulación exagerada de la conciencia por parte de las autoridades supremas de los Estados, jugando con voces rasgadas, inyectando adrenalina constante y una agilidad en guitarras hasta límites insospechados en aceleradas composiciones como «Europa», «Nacimos Para Reventar», «Muerte y Destrucción», «Soltad Al Doberman», «Lobotizame», «Mi Hiroshima», «Ahora O Nunca» y «Sanngre», bajo un espíritu muy directo y con una gran fluidez. Una fuerte actitud y carácter, reincidiendo en un sonido grueso con esa voz agresiva y sucia de Podri que impone una agresividad bastante acuciada.