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La banda manchega Umbilikal D.B. ha irrumpido en la escena nacional con las ideas muy claras, con un estilo propio y reconocible, pero sin marcarse límites en lo musical, con una gran fluidez en elaboración y transparencia en la expresión de sus mensajes para hacer mella en el oyente, dando distinción y singularidad a cada tema. En su primer trabajo «Extinción», se aprecia pinceladas de buenos músicos, un sonido de huella identificativa totalmente propia, demostrando que la calidad y la actitud pueden darse la mano, un alto nivel compositivo, unos patrones rítmicos muy cohesionados, crudos y abrasivos junto a unas letras en las que no se muerden la lengua. ¡No hay excusa, es el momento de descubrirlos!

Antes de empezar a hablar de vuestro primer trabajo «Extinción», me gustaría saber cómo surgió la banda y cómo llegasteis a dar con el nombre idóneo para el grupo

Muchos de los componentes de la banda vienen de otros grupos de la zona que no llegaron a cuajar, con una larga trayectoria y varias bandas en su haber. A partir de un proyecto, que tenían Poto (batería) y Sto. Morraya (cantante), llamado Heisenberg y del cual se fueron cayendo varios integrantes progresivamente, se fueron incorporando a la formación primero Noblehash como guitarra y segunda voz, Jhonny Palote y Pako Chawen a la percusión y Apeles al bajo. En ese momento se decidió que la banda debía tener un nombre nuevo, ya que mucho había cambiado. Más tarde, a raíz de la pandemia, Pako decidió abandonar la banda y creímos necesaria la incorporación de un segundo guitarra, Pedro MesCita, para ganar contundencia y versatilidad en las composiciones. De esta manera, se llegó a la formación actual.

En cuanto al nombre Umbilikal D.B, surgió del mismo sitio del que nos surgen las canciones, de las mismísimas entrañas, las cuales se canalizan a través de nuestro ombligo para proyectarse hacia el mundo (jejejejeje) y D.B viene de la frase Doing the Bastard, que traducido al Manchego viene a ser “hacer el cabrón”, algo que nos define muy bien tanto en nuestro estilo de música como en nuestra vida en general. Para nosotros “hacer el cabrón” tiene dos vertientes importantes: una es el trabajo duro y sin contemplaciones para alcanzar las metas que nos proponemos y la otra es el disfrutar de todo aquello que hacemos, en cada momento, sin filtros ni pelos en la lengua.

Supongo que el proceso de composición y grabación de este disco debut «Extinción», ha sido algo costoso al tratarse del primero. ¿Cuáles han sido las ideas fundamentales en torno a las cuales ha girado el proceso de concepción del mismo? ¿Teníais las ideas claras de antemano en cuanto al sonido o las composiciones han sufrido cambios respecto a cómo fueron compuestas?

La principal idea a la hora de afrontar el reto de grabar era “sencilla” (jajajaja) queríamos que sonara lo que realmente tocábamos, es decir, no queríamos hacer una superproducción con baterías retocadas, mil guitarras, bajos imposibles y percusiones que luego no fuésemos capaces de defender en directo. Lo que suena es lo que podemos y sabemos tocar. También teníamos algo muy claro, lo que queríamos es señalar con nuestras letras, los problemas que siguen existiendo en la sociedad, remarcándolos para que no pasen desapercibidos y de esa manera los arreglen aquellos que deban hacerlo.

En cuanto al sonido, siempre hemos buscado un sonido crudo, abrasivo, ácido y sobre todo con muchas cosas inesperadas, como la vida misma. Y aunque en el disco plasmamos lo que teníamos en mente, es cierto que nos gusta que las canciones cobren vida y evolucionen. Y por eso en el directo, pueden escucharse con matices diferentes, pero siempre con una esencia reconocible.

¿Quién ha sido de vosotros el que más ha asumido la tarea de la creación de los diferentes patrones rítmicos?

Es una auténtica labor grupal. Surge una idea de la que queremos hablar y a partir de eso, dejamos fluir lo que sentimos al respecto de esa idea y vamos cogiendo todo aquello que le pone los pelillos de punta al batería (jajajaja). Todos intervenimos en las composiciones de los demás y eso hace que nuestras canciones tengan una personalidad propia fruto de un trabajo colectivo, no de un solo integrante.

blankEn este primer trabajo mostráis sólidos argumentos en absoluta crudeza, dinamismo rítmico y una gran coctelera de influencias y estilos, germinando un estilo propio al que es difícil de catalogar ¿Cuál es el rasgo más importante que define vuestro sonido? ¿Qué elementos del disco creéis que os pueden ayudar a haceros un hueco dentro de la saturada escena nacional?

Toda nuestra música se puede definir como Metal Bastardo, ya que no es hijo de ningún estilo en concreto y de todos a la vez. Somos fruto de una gran orgía de estilos musicales y de grandes momentos de placer. No queremos ser reconocidos en ningún estilo en concreto, nos sentimos muy cómodos como bastardos y lo llevamos con la cabeza muy alta (jajajaja).

Letras directas y sinceras, crudas y reales, sin tapujos junto con ritmos abrasivos y cambios inesperados. A esto le añades percusiones con ritmos tribales y otros sonidos que hacen sumergirte en aquello que queremos hacer resonar en las conciencias de la gente. Todo esto, creemos que es un coctel perfecto para un buen pedo.

Es evidente que sacáis el máximo partido al hecho de disponer de un vocalista versátil y con recursos, quien se amolda a todo tipo de melodías, sacando todo su potencial e intentando dotar a la propuesta de un carácter mucho más personal y natural. ¿Cómo se alcanza ese grado de singularidad, no poniéndose límites a la hora de componer y huyendo del uso de los patrones más comunes?

Todo su potencial se debe a las clases de canto que recibió de la Escolanía de la Santísimas Niñas Maníacas. Gracias a sus años de devoto servicio, el Sargento, endulzó su rasgada voz. (jajajajaja)

Realmente, es algo natural. Es la proyección de una idea a través del dolor y la rabia, también a través del amor y la ternura; sin miedo a mostrarnos tal y como somos, sin máscaras, sin filtros… No huimos de nada, quizás es que nuestras cabezas no funcionan de manera normal (jajajajaja).

Hablarnos un poco de la temática de las canciones. Los temas están cargados de letras potentes y mensajes que no dejan indiferente a nadie. ¿Qué tipo de cosas son las que os hacen escribir una letra? ¿Os influye lo que leéis en los periódicos y veis en la televisión o más bien vuestras canciones son fruto de vuestras vivencias personales?

Nos influye lo que vivimos, lo que vemos en la calle, lo que hablamos en los bares, los problemas que nos cuenta la gente que nos rodea y los problemas que también tenemos nosotros.

Nos jode profundamente que la gente de hoy, no sea capaz de levantar la cabeza de una pantalla y se traguen todo aquello que quieren los que manejan esas pantallas. El mundo real está aquí y ahora. En este mundo están pasando muchas cosas que la gente no quiere ver, porque no es fácil de ver, no es cómodo; es más sencillo vivir anestesiado y ver sólo aquello que quieren que veas, prefieren ver el mundo en 4K. Y por eso, nosotros, queremos señalar el problema, no para solucionarlo, porque no está en nuestras manos siempre, pero sí para marcarlo y de esa manera ayudar a que los responsables lo solucionen.

¿Qué clase de tópicos son los que abordáis en vuestras canciones? Por ejemplo «La Corbata Colombiana» está inspirada en la serie «Narcos» y «La Paloma De La Paz», es una declaración de principios de quién no aprende de los errores del pasado, está condenado a repetirlos. Hasta rendís un homenaje a las víctimas de los ataques terroristas del 11-M en Madrid en «El Pozo del Tío Raimundo»…

Más que tópicos son problemas que siguen existiendo y que parece que se han convertido en tópicos porque no dejan de repetirse o se alargan en el tiempo, porque realmente nadie quiere solucionarlos. Es una grandísima pena, que en pleno siglo XXI, tengamos que seguir hablando de guerras, de narcos que controlan países bajo el auspicio de sus gobiernos, de gente que muere por una idea política o religiosa, de los abusos de poder que todavía se siguen dando por parte de algunos integrantes de las fuerzas y cuerpos de seguridad del estado, de la violencia que ocurre dentro de muchos hogares, independientemente del género que sea la persona violentada, de la cantidad de suicidios que ocurren y que nadie se hace eco, de cuanta mala gente hay a nuestro alrededor que parece que te tienden una mano y lo que quieren es ponerte una soga al cuello . Pero también hablamos de amor, de respeto, de que cada uno pueda ser capaz de llegar a su máximo potencial sin que se le critique por ello.

¿Consideráis que habría que cambiar muchas cosas del sistema por el que se rige social y económicamente el mundo hoy en día?

El problema es que intentamos llevar a cabo sistemas solidarios sin tener en cuenta una premisa básica: el hombre es egoísta por naturaleza. Por lo tanto, si no invertimos fuertemente en educación y en valores, en los cuales apoyarnos para corregir este defecto inherente a nosotros, si no invertimos en tener al mejor profesorado posible y dotarlo de herramientas eficaces para realizar su trabajo, si no invertimos en tener un relato veraz de la historia, sin adaptaciones interesadas, para evitar cometer errores del pasado y corregir otros que se están cometiendo, si no invertimos en valores como el respeto, el amor, el compañerismo, la solidaridad, para tener una base fuerte en el que se sustente un sistema justo y solidario… si no hacemos todo esto, cualquier sistema social y económico va a fracasar estrepitosamente.

Y esto no es algo que hayamos descubierto nosotros, ni mucho menos. Esto es algo que lo saben sobradamente los que lo tienen que saber para llevarlo a cabo, pero no les interesa hacerlo, porque de esta manera no podrían controlarnos como lo hacen.

Supongo que cada uno de vosotros tenéis vuestros propios gustos musicales y una distinta manera de concebir la música, ¿Cómo hacéis para alcanzar un determinado consenso a la hora de definir el camino a seguir musicalmente?

Cada uno aporta sus ideas, sus sentimientos e influencias musicales a cada composición. Realmente se trata de dejar los egos fuera del local y abrirse en canal para sacar lo mejor de cada uno. En algunos temas puede haber más cosas de unos que de otros y en otros, al contrario. Pero eso no es un problema. Se trata de hablar mucho entre nosotros, de buscar una idea común del mensaje que queremos lanzar, y empezar a construir sobre esa idea con los diferentes matices que aporta cada integrante. Y hasta que todos no sentimos que lo hemos conseguido plasmar, el proceso continúa sine die.

blankEl disco suena contundente y atronador, canciones con una tremenda pegada, asombrosa versatilidad rítmica, buenas letras y un sonido que engancha, que en ocasiones recuerda a los sevillanos Narco. ¿Cómo se alcanza ese nivel de técnica y brillantez para saber cómo colocar cada elemento en el lugar adecuado y provocar una reacción emocional en el oyente? ¿Hacia dónde progresan vuestros gustos e influencias musicales?

No hay una fórmula mágica, ni somos unos virtuosos de la música, ni de cerca. Compromiso, constancia y trabajo, es decir, muchas horas de ensayo durante muchos años para clarificar la idea hacia la que queremos llegar como grupo y lo que queremos provocar en nuestra audiencia. También un gran trabajo por parte de Miguel (Popsonic Recording) en la grabación, que dedicó su tiempo a comprender qué cojones queríamos plasmar en el disco y llevarlo a cabo, con mucha paciencia y mucho amor.

Hacia donde vamos es un misterio, el tiempo lo dirá. Quizás los años nos hagan hacer canciones al estilo Perales (grandísimo compositor) o terminemos por ser fans de hologramas y composiciones hechas por Inteligencia artificial…

Vivimos en una época donde la tecnología juega un papel importante. Grabar un disco está al alcance de cualquiera, con lo que ocasiona es que haya un exceso de bandas e incluso muchas de ellas no ofrecen casi nada nuevo. ¿Cuál es vuestra opinión de los nuevos tiempos en la música? ¿No creéis que actualmente hay muchos grupos que saturan sus trabajos con exceso de producción de forma que oculta o disfraza la falta de creatividad? ¿Cómo valoráis el momento que os ha tocado vivir como banda?

Nosotros no somos quienes para juzgar cual es el número óptimo de bandas que deban existir, ni lo que deban ofrecer. La música es un medio de expresar y es genial que cada vez haya más gente que se quiera expresar a través de la música, independientemente de si es algo nuevo o es algo que se haya oído ya muchas veces. Tenemos que ser capaces de valorar el esfuerzo que implica tener una banda, crear canciones y llevarlas a un estudio o a un escenario. Y por desgracia, no se pone en valor todo esto en la sociedad y ni se da el apoyo que realmente se merece.

La tecnología es una gran herramienta que te puede ayudar mucho a plasmar lo que llevas dentro de ti, y cada vez es más fácil poder hacerlo, y eso es de agradecer.

La escena musical actual funciona como casi siempre lo ha hecho, por intereses económicos, apartándose del misticismo y la espiritualidad que pueda tener la música. Si quieres tener acceso a música libre, sin filtros ni cortes por parte de la industria debes acudir a la escena “Under”, donde las bandas realmente llevan a cabo lo que verdaderamente llevan dentro, sin maquillajes.

Realmente el producir más o menos un disco, no es precisamente por falta de creatividad, de hecho, es todo lo contrario, hay que tener mucha creatividad para hacer una gran producción en el disco y suene de puta madre. Pero al final, eso son decisiones muy personales. Nosotros creemos en la sencillez, en la contundencia. Nos gusta meter poca producción para intentar sonar lo más puramente nosotros que sea posible. Pero esa es nuestra idea.

El momento actual, por un lado, es la hostia, porque tienes la oportunidad de llegar a gente de todos sitos, cosa que hace 25 años, cuando empezamos en esto, era algo impensable. Gracias a las plataformas digitales, redes sociales puedes proyectar a Umbilikal D.B a todo el mundo y eso es muy grande.

Por otro lado, no creemos que haya grandes cambios, el poder acceder a grandes escenarios es complicado porque lo tienen copado 4 agencias y hacen y deshacen en función de sus intereses. Y los escenarios de pequeñas salas cada vez escasean más, porque a la gente le cuesta mucho abrirse a nuevas bandas y apoyarlas, por lo tanto, es complicado sustentar esos negocios.

Pero nosotros seguiremos “haciendo el cabrón” y hasta donde se llegue.

Cuando una banda graba un disco siempre piensa que es el mejor pero después de un tiempo llega a la conclusión de que hay cosas que se podrían haber hecho mejor ¿Tenéis esa sensación de que podríais haber desarrollado aún mucho más ciertas facetas?

Bueno, eso forma parte de la evolución natural de una banda. Siempre hay que poner una primera piedra en el proyecto y se hace con toda la pasión y el conocimiento que en ese momento se dispone. Y como nosotros creemos que esto es un constante aprendizaje, pues cuando miras trabajos anteriores te das cuenta de que, si lo tuviéramos que grabar ahora, haríamos cosas diferentes, pero eso es normal. Es como si volvieras a nacer, pero sabiendo lo que ahora sabes… ¿vivirías de la misma forma que lo has hecho?

La portada del disco es muy impactante, muy acorde al contenido del mismo. ¿De qué manera están los conceptos implícitos en la misma?

La portada representa un mundo en plena decadencia, sin recursos y al borde de la extenuación, debido a la sobreexplotación del ser humano sin tener en cuenta la sostenibilidad de su entorno. Muestra que, si continuamos por el camino que llevamos, vamos camino de la destrucción del planeta y nuestra propia extinción. También manda un pequeño mensaje de esperanza, depositada en las nuevas generaciones, los niños; por eso aparece el mundo en sus manos, porque son los únicos que pueden dar un giro a esto, todavía no están corruptos. Aunque los estamos dañando, educándolos sin valores o con valores erróneos. Por eso aparece el niño de la portada con un hilo de sangre que sale de su nariz. No es sólo un mensaje ecologista, es un mensaje que atañe a los países en cuanto a cómo se está planteando el futuro, con guerras, pandemias, gobiernos corruptos, ladrones, personas sin valores que lo único que les importa es la imagen y el dinero. ¡El tiempo se agota, debemos actuar!

blank¿Qué opinión tenéis de la escena en relación a bandas de vuestro estilo? ¿No creéis que hay una saturación de propuestas y que la gente no puede abarcar todo lo que sale? ¿Qué bandas os han sorprendido últimamente?

En general, podemos decir que hay un gran nivel, con mucho que decir y con ganas de actuar y darlo todo sobre el escenario. Sólo falta que les den la oportunidad de hacerlo y la continuidad necesaria para hacerse oír.

Si hay una saturación de propuestas, llegará un momento que de forma natural se autorregule. El problema no es que la gente no pueda abarcar, es que ya no se le presta tanta atención a los discos que salen. Las tecnologías están generando mucho déficit de atención. Y la gente prefiere gastarse 200€ en ver un superconcierto de una banda consagrada, que ir a 20 conciertos de 10€ de bandas underground, quizás por acomode, quizás porque hay que meterse hasta en la sopa (nivel publicidad=mucha pasta) para que la gente se harte de verte, de escucharte y comiences a llenar salas. Por lo tanto, se hace muy complicado sacar la cabeza. Bandas como XpresidentX, Venko, Engaño Manifiesto son gente que están haciendo las cosas muy bien y con calidad.

¿Qué objetivos esperáis alcanzar con este disco? ¿Qué le pide Umbilikal D.B. al momento presente?

Esperamos poder disfrutarlo en directo y que la gente lo disfrute con nosotros. Este disco es el punto de partida de un viaje de 6 amigos que quieren gozar el camino mientras dure y si se acaba, el poder mirar atrás y recordar todo esto con una gran sonrisa de satisfacción.

Queremos salud, mucho amor y paz. Que esto nos permita “hacer el cabrón” durante muchos años por cualquier rincón del mundo mundial y del universo universal.

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