A veces no basta con atesorar una buena técnica o una brillante alternacia de agresividad y melodía para resultar tremendamente inpactantes e ir cosechando seguidores rápidamente. Tal vez sea necesaria una excelente convergencia de influencias musicales a fin de lograr un sonido único y distintivo, con sólidos argumentos y recursos para ello. Los navarros Henkore han sabido cohesionar con mucho criterio sus gustos musicales, creando composiciones de explosivo sonido de metal contemporáneo, con intrincados pasajes y contrastes, esplendida agilidad en los ritmos y gran versatilidad en el juego de voces, fusionando influencias ya bien asimiladas por los amantes del metalcore.
En su estreno en vivo dentro de un marco incomparable, en la primera edición del Irrintzi Fest, celebrada en el Frontón Municipal del Valle de Allín en Larrion/Amillano (Navarra), la formación exhibió destellos compositivos muy brillantes, mirando hacia el metal moderno de una manera diferente, con capacidad de enganche, fluidez rítmica, radiante técnica e imaginación, y un sonido perfectamente consolidado y de nivel internacional, dejándose llevar por las sensaciones tras recibir todo el cariño por parte de público y amigos en el arranque de la actuación. Comenzaron con un plano técnico muy cuidado, mostrando su vocalista femenina Hildegar Astartea un estado vocal pletórico en “Resart”, haciendo gala de una formidable riqueza musical en matices dinámicos y unas bases musicales definidas bajo su prisma.
Al no disponer aún de una nutrida colección de canciones propias, la banda tuvo que echar mano de formidables versiones “Limits” (Bad Omens) y”Ultrviolet” (As Everything Unfolds), revistiéndolas de un brillo especial, las cuales fueron intercaladas entremedias de algunas de sus personales composiciones como “Poisoned Dreams” y “Resonate”, con una bipolaridad excelentemente equilibrada, alternancia de sonoridad agresivas y melódicas bajo un gran entendimiento entre los integrantes, con gran fuerza guitarrera y pegada en algunas transicciones.
La formación hizo sonar como un cañón algunos temas de su esperada primera obra como “Agony” y “The Edge” , con esas rupturas abruptas y esos contrastes de tesituras, fluyendo todas las emociones que puedas imaginar, exponiendo si cabe mayores recursos, manteniendo una buena dosis de imaginación y una cautivadora personalidad que les irá proporcionando una identidad musical reconocible, siempre que no renuncien a introducir elementos que engrandezca sus composiciones.